Un Aleph es uno de los puntos del espacio que contiene todos los
puntos.
Jorge Luis Borges. El Aleph. 1945
Las tramas en las obras de Juan Francisco Acuña semejan
anacrónicos fragmentos de aquella esfera borgiana. Reflejo y centro de todas
las miradas, al igual que aquella, son lugares en los que todo confluye y se refleja
a la vez, sin superponerse. Lo que aquel
atormentado personaje se preguntaba, cómo transmitir a los otros el infinito, resuena
más que nunca delante de estas producciones.
Tras experimentar con técnicas convencionales, Acuña
comienza a incursionar en el esmalte sintético, su versatilidad y sus texturas hace ya casi una década. Producto de este
trabajo, las series “Tejido des-tejido”,
“Stella-rium” y “Ensayo sobre la aisthesis”, proyecto sobre el que aún trabaja,
performan una a una un discurso expansivo y peculiar.
Dueño de un gran virtuosismo, el artista comienza sus
obras espontáneamente a través de un dripping
libre y sugerente. Sobre las formas que surgen compone espacialmente con la
ayuda de su intuición pero también de las proporciones áureas. El microcosmos empieza
a tomar forma cuando, a mano alzada y con pincel, pinta cuadrados diminutos. Termina
por agregar gotitas de esmalte a la ya bien lograda textura visual.
Sinécdoques en estado puro, no es de extrañar que sus
obras remitan a un todo inaprensible. Pintadas sobre lienzos cuadrangulares se
rememoran, en el espectador sensible, como circulares y hasta esféricas.
Pequeñas porciones de universo, en ellas la pintura se vuelve tridimensión y la
espontaneidad, raciocinio.
Juan Francisco Acuña
se presenta con parte de su serie “Tejido des-tejido” junto a Pat Muller en 33
Arte Contemporáneo, la galería de la Boutique del Libro, en el bajo de San
Isidro.
Para saber más: https://www.facebook.com/pages/33-Arte-contempor%C3%A1neo-Galer%C3%ADa-/185168704861650?fref=ts
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