La seducción fatal. Imaginarios eróticos del siglo XIX, fue la apuesta fuerte del Museo Nacional de
Bellas Artes para cerrar el 2014 y enfatizar su celebrada política de
circulación del acervo de la Institución, el de carácter público estatal más
importante de toda América Latina, en el
año que empezaba.
Desde Noviembre y hasta el mes de marzo bajo el relato
curatorial de Laura Malosetti Costa, obras en reserva pocas veces exhibidas, junto
a otras paradigmáticas de la colección, más algunos prestamos imprescindibles, conforman, en palabras de la directora del
Museo, una revisita desde un punto de
vista pocas veces explorado: el de la mirada erótica y erotizante sobre el
cuerpo de la mujer en el siglo XIX.
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| Henri Caro Delvaille, La manicure, circa 1901 |
En este sentido, la presentación del catálogo otorga un
cierre fundamental y necesario al objetivo de la muestra de desarmarr lecturas
cristalizadas. Así es que no sólo complementa la muestra sino también la completa con obras que por
diferentes causas no pudieron pertenecer a la exhibición. Convoca además a
expertos en fotografía, cine y folletería erótica para dar cuenta de las
diferencias del género al cambiar de soporte.
El sello distintivo, sin embargo, fue la iniciativa del MNBA de invitar a escritores
argentinos, a través de la gestión de la Biblioteca Nacional Mariano Moreno, a
dialogar con algunas de las obras, interpretarlas y dejar en evidencia la
multiplicidad de abordajes. El desafío
de hacer a la escritura hablar de la pintura. El desafío siempre enriquecedor
de entrecruzar dispositivos y desarticular la manera en que los significados
son encarnados.
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